Home » Noticia Destacada, Noticia País » Paralización de Mina Invierno y plan de descarbonización: ¿Cuál es el escenario del carbón en Chile?
 

Chile y varios países del mundo están con planes de bajar o eliminar la dependencia de este recurso.

Actualmente en Chile existen 28 centrales termoeléctricas a carbón. Están ubicadas en las comunas de Iquique, Tocopilla, Mejillones, Huasco, Puchuncaví y Coronel y en un plazo no mayor al 2040 deberán cesar sus operaciones, según el plan de descarbonización del gobierno.

Para generar esta energía, el material, que se extrae de la tierra mediante procesos mineros -a diferencia del que se usa en los hogares que proviene de árboles-, se quema y produce calor; este calor transforma vapor y finalmente es éste el que produce la electricidad.

Dos de las centrales (ver tabla más abajo), de la empresa Engie, cerraron este mes en Tocopilla. En conjunto sumaban una potencia instalada de 171 MW al Sistema Eléctrico Nacional (SEN), compuesto por los antiguos sistemas Interconectado Central (SIC) e Interconectado del Norte Grande (SING).

En aquella oportunidad, la entonces ministra de Energía Susana Jiménez, argumentó que “los avances tecnológicos hacen posible sustituir gradualmente las centrales a carbón con otras que son renovables y competitivas, las cuales están altamente disponibles en nuestro país, tal como son las energías provenientes del sol, el viento, la tierra y el agua”.

Según cifras de Generadoras de Chile, la evolución de la producción eléctrica en Chile a base de carbón creció significativamente en 22 años: en 1996, la inyección al SEN llegó a los 9.733 MW/h (de un total de 27.904 MW/h) y en 2018 a los 29.453 MW/h (de 76.292 MW/h).

Por otra parte, la Comisión Nacional de Energía (CNE) apunta que hasta mayo de 2019 el carbón correspondía al 21,65% (5.152,65 MW) de la capacidad total instalada a lo largo del país. A continuación le siguió el gas natural con el 19,02% (4.525,89 MW) y muy por debajo estuvo la geotérmica, con el 0,17% (39,70 MW) y la mini hidráulica de pasada con el 2,08% (495,02 MW).

Cabe destacar que “las termoeléctricas no son sólo a carbón, hay también a gas e incluso a diésel. De estas tecnologías, las a carbón hoy día producen alrededor del 40% de la electricidad de Chile, esa es la importancia que tiene el carbón en la red eléctrica y es muy barato como insumo, por eso es que se usa tanto”, explica el académico de Ingeniería Eléctrica UC Álvaro Lorca.

“El gran dilema es que el carbón es excesivamente contaminante a nivel tanto de las localidades donde se genera con carbón como a nivel global, en términos de impacto en el cambio climático, por eso muchos países han tratado de reducir la utilización del carbón y Chile, desde mi punto de vista, lo ha hecho muy bien en alinearse con esta mirada”, agrega.

Algo similar comenta el ex subsecretario de Medio Ambiente Jorge Canals: “Sin perjuicio de ser altamente contaminante, la generación eléctrica a carbón es una energía de ‘base’, esto es, contribuye a garantizar la seguridad en el suministro, al estar disponible en forma continua, cuestión que sigue siendo una de las desventajas de las Energías Renovables No Convencionales (ERNC), especialmente solares y fotovoltaicas”.

“De hecho, un reciente informe del Coordinador Eléctrico Nacional, previo al anuncio del cronograma de descarbonización, modeló la participación de todas las fuentes de producción de energía en el SEN para tres escenarios de hidrología: húmeda, media y seca durante 2019, proyectando para último caso, que el carbón sería responsable de un 39,9% de participación en la producción del sistema, lo que significaría un aumento respecto al 2017 y 2018, añade.


Fuente/Emol
Chile Minería/www.chilemineria.cl 
www.facebook.com/chilemineria.cl/ 
twitter.com/CHILEMINERIA 
#chileminería, #minería, #energía,#cobre,#comunidades,#negocios,#aprimin
GARRA